Portón levadizo o corredizo, ¿cuál es la mejor opción?

Sin duda, los portones son indispensables para la seguridad de los inmuebles en general, ya sea una casa o un negocio. Para más comodidad y economía de espacio, su forma de apertura puede ser levadiza o corrediza. Hoy en el blog de Ortega Puertas Automáticas analizaremos ambas opciones para ayudarte a elegir la mejor para tu caso particular.

Portones levadizos

Los portones levadizos son una excelente opción para los lugares donde no hay demasiado espacio para un portón de dos hojas que se abren hacia dentro o hacia fuera. Únicamente se requiere una puerta cuyo mecanismo de apertura y cierre es un motor que desplaza hacia arriba la puerta para su apertura.

El funcionamiento de los portones levadizos es similar al de las cortinas para negocios. Sin embargo, estas no enrollan, por lo que requieren un techo firme para ser soportados, o paredes laterales en todo caso; puedes encontrar diseños modernos, elegantes, con mecanismos automatizados para una apertura sencilla. Además, estos portones son muy seguros al no poder forzarlos fácilmente y pueden incluir sistemas de seguridad muy avanzados, como sensores de movimiento y bloqueo automático.

Si planeas instalar un portón levadizo, considera que necesitas un espacio amplio hacia arriba para dar espacio al portón cuando esté abierto y para el motor.

El único punto en contra de los portones levadizos es que el mecanismo de elevación requiere este espacio comentado, y el mantenimiento constante los mantiene siempre en óptimo funcionamiento y adecuados niveles de ruido al abrir.

Portones corredizos

Los portones corredizos van soportados a un riel o a piso, dependiendo de su sujeción,  y permite el movimiento horizontal sobre el marco o soporte; son una excelente opción para espacios pequeños o limitados, en los que la hoja solo se desliza por el riel para abrirse.

Dentro de las ventajas de estos portones encontramos que su diseño es elegante, cómodo, de fácil apertura e instalación. Además, son más económicos que los levadizos y también pueden incluir sistemas de seguridad como sensores de movimiento, mecanismos automatizados de apertura y bloqueo.

Su única desventaja es que pueden ser difíciles de operar si el riel acumula suciedad, grasa o polvo, o bien, si la puerta se desalinea o no está bien soportada. Sin embargo, esto también se soluciona con un buen mantenimiento preventivo.

Entonces, ¿qué me conviene más?

Si buscas la mejor opción entre un portones automáticos levadizo o corredizo, la respuesta es: depende de tu espacio, presupuesto, gustos y necesidades. Ambos son seguros, cómodos, fáciles de usar y puedes encontrar diseños hermosos que se adapten al lugar donde planeas instalarlo.

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